Esta columna fue publicada originalmente por El Nuevo Día el 20 de febrero de 2022
El cambio real nunca es fácil, pero la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados de Puerto Rico (AAA) le está demostrando a la Isla que se puede lograr. Con mucho trabajo, dedicación y disciplina, los frutos de esta labor son cada vez más evidentes.
Aún queda mucho trabajo por hacer, sobre todo en cuanto a reducir las pérdidas de agua y elaborar presupuestos balanceados según las normas de contabilidad en materia de acumulación modificada. No obstante, en colaboración con la Junta de Supervisión y Administración Financiera y siguiendo su Plan Fiscal Certificado como ruta para mejorar, la AAA está transformando sus condiciones fiscales y operacionales para prestar mejores servicios.
Históricamente, la AAA se ha visto obstaculizada por una infraestructura antigua, costosa e ineficiente. Así lo demuestran los altos niveles de pérdida de agua del sistema, pues el 60% nunca llega a los abonados y si lo hace, no se factura debido a robo o por error del contador. Dada la falta de estabilidad financiera, agravada por la crisis fiscal de Puerto Rico, los proyectos de inversión en mejoras permanentes se habían suspendido desde el AF2015.
Sin embargo, el pueblo de Puerto Rico depende de agua limpia y segura para tomar, para cocinar y limpiar… para vivir. Las recientes lluvias torrenciales, que produjeron cerca de 12 pulgadas de lluvia en algunas partes de la Isla en un periodo de 48 horas, también resaltan la importancia de una infraestructura de agua y alcantarillado que sea capaz de resistir el embate de los cambios climáticos.
¿Qué se ha logrado? Para obtener información precisa sobre la producción de agua, los planes fiscales de la Autoridad exigían la instalación de nuevos medidores de flujo en las principales plantas de tratamiento de aguas. En el AF2021, la AAA completó el proyecto de medidores de flujo y aumentó su medición de la producción de agua de un 44% a un 83%, mejorando así el manejo de este preciado recurso.
En cuanto a las mejoras permanentes, ya se están construyendo 26 proyectos — una inversión de $203 millones para el pueblo de Puerto Rico,que incluye la sustitución de tuberías para reducir la pérdida de agua y un nuevo laboratorio central en Caguas que analiza el agua en busca de bacterias y minerales. Estos proyectos promoverán la fiabilidad del servicio y proporcionarán servicios esenciales para los abonados.
Otros proyectos en curso incluyen el dragado del embalse Carraízo (sobre $59 millones) para aumentar la disponibilidad del agua y reducir la necesidad de racionamiento en tiempos de sequía, y mejorar la ineficiente infraestructura de medición de la AAA a fin de aumentar la precisión de la facturación (cerca de $300 millones). El Programa de Mejoras Permanentes de la AAA prevé inversiones anuales de $548 millones entre el AF2022 y el AF2026.
¿Cómo puede la AAA llevar a cabo estos importantes proyectos? En primer lugar, la Autoridad ha reestructurado cerca de $1,000 millones en deuda federal y ha realizado dos transacciones de reembolso de bonos. El resultado fue un ahorro de casi $1,100 millones a lo largo de la vida de estos instrumentos. En segundo lugar, los recaudos gubernamentales han mejorado, lo que ha permitido colectar alrededor de $155 millones de las agencias gubernamentales, las corporaciones públicas y los municipios. En tercer lugar, los modestos aumentos en la tarifa, que equivalen a 64 centavos adicionales al mes para muchos residentes, han generado alrededor de $300 millones desde el AF2018, lo que ayuda a estabilizar y reforzar las reservas de efectivo de la AAA.
Dando continuidad a los esfuerzos, reducir las pérdidas de agua es un importante objetivo pendiente. La AAA ha recibido una asignación que ronda los $3,700 millones en fondos de FEMA para proyectos de reconstrucción en toda la Isla y la Autoridad espera aumentar estos trabajos en el año entrante.
La AAA, por mandato de Promesa, también tiene que elaborar un presupuesto balanceado según las normas de contabilidad en materia de acumulación modificada. Este requisito se aplica al gobierno de Puerto Rico y a todas las instrumentalidades al amparo de Promesa.
El último proyecto destacable de la AAA consiste en reducir las pérdidas comerciales mediante la sustitución de los antiguos medidores de flujo por unos “inteligentes”, nuevos y más precisos. Estos contadores inteligentes mejorarán la capacidad de facturación al reducir las inexactitudes de los contadores y ayudarán a la agencia de servicios públicos a identificar mejor los robos y las fugas.
La AAA comenzará pronto las vistas públicas sobre su estructura tarifaria. Este proceso es importante para garantizar que continúe la responsabilidad fiscal, así como los niveles de ingresos adecuados –la cantidad necesaria para cubrir las necesidades de funcionamiento y las mejoras permanentes– ya que son fundamentales para garantizar un agua fiable, asequible y segura para Puerto Rico.
La Junta de Supervisión continuará trabajando con la AAA para asegurar que la transformación de la Autoridad sea duradera, en beneficio del pueblo de Puerto Rico.
