Es hora de dejar la quiebra atrás

Columna por el Presidente de la JSF: David A. Skeel, Jr

Esta columna fue publicada originalmente por El Nuevo Día el 7 de noviembre de 2021

Es un momento verdaderamente histórico para Puerto Rico. Estamos más cerca que nunca de ponerle fin a la quiebra y de convertir la recuperación de Puerto Rico en un crecimiento económico real y sostenible. El Plan de Ajuste que propusimos al tribunal para su confirmación reducirá la deuda del gobierno en casi un 80% y les ahorrará a los contribuyentes puertorriqueños más de $50,000 millones en pagos a los acreedores.

Ahora Puerto Rico está encaminado hacia la recuperación. No cabe duda de que poner fin a este capítulo será un paso significativo para Puerto Rico; especialmente si lo encamina a un recorte sustancial de los futuros pagos a los acreedores, despeja el camino para el acceso a los mercados financieros, y si evita que los próximos gobiernos repitan las mismas prácticas que condujeron a esta quiebra.

¿Cómo hemos llegado a este punto de inflexión en la dolorosa crisis de la deuda de Puerto Rico? Nosotros, la Junta de Supervisión, negociamos, regateamos, presionamos y, al final, convencimos a un número extraordinariamente grande de acreedores, incluyendo fondos de inversión y aseguradoras de bonos, para que aceptaran concesiones significativas que levantarán esta carga que recae sobre las futuras generaciones de Puerto Rico. También obtuvimos el apoyo de los Servidores Públicos Unidos de Puerto Rico (SPU) / AFSCME Consejo 95.

Este proceso, definido por Promesa, es la única forma viable de salir de la quiebra de Puerto Rico y ya casi lo hemos logrado. La Legislatura de Puerto Rico y el gobernador han demostrado ser unos fuertes negociadores, así como la propia Junta de Supervisión, y han hecho su parte con la Ley 53-2021 para permitir que Puerto Rico avance en el proceso de confirmación del Plan de Ajuste. La vista judicial que comienza este próximo lunes les permitirá a todos, tanto a los acreedores como al público en general, expresar sus opiniones antes de que la jueza Laura Taylor Swain confirme el plan para finales de este año como se espera.

¿Por qué estoy tan convencido de que este es un buen plan para Puerto Rico? Porque saca a Puerto Rico de la quiebra, pero también porque les brinda a todos los puertorriqueños importantes beneficios, de los cuales cabe resaltar los siguientes ocho:

  • El Plan reduce drásticamente los pagos de la deuda pública. Antes de Promesa, Puerto Rico tenía que pagar a los acreedores 25 centavos de cada dólar que recaudaba de sus residentes por medio de impuestos y tasas; el Plan reducirá esa cantidad a 7.2 centavos.
  • El Plan reestablece hasta $1,500 millones a los empleados públicos de la pérdida de aportaciones al Sistema 2000.
  • El Plan estableció un Fideicomiso de Reserva de Pensiones, financiado con al menos $175 millones anuales durante una década con el fin de crear una alcancía para los retirados y así asegurarse de que reciban su pensión, incluso en tiempos económicos difíciles.
  • El Plan reduce las reclamaciones de los bonistas y otros acreedores en más de un 40%, en promedio, y aún garantiza que el gobierno conserve casi $20,000 millones en efectivo para los gastos cotidianos y de emergencia.
  • Para los retirados del gobierno, el mayor grupo de acreedores de Puerto Rico, el Plan garantiza el mejor trato posible: cero recortes.
  • El Plan ofrece una vía para que Puerto Rico recupere el acceso a los mercados de capital. Todos los gobiernos necesitan el acceso a los mercados de capital para obtener los fondos necesarios que permitan financiar los grandes proyectos de mejora de la infraestructura que forman parte de la base del desarrollo económico y la calidad de vida.
  • El Plan de Ajuste incluye una Política de Manejo de la Deuda que establece las normas que permiten al gobierno pedir prestado en el futuro, determinan cuánto puede pedir y cuál será el propósito.
  • El Plan resolverá finalmente cientos de demandas que le cuestan al gobierno decenas de millones de dólares tan solo en honorarios legales.

Entendemos que aún existan objeciones al Plan, pero creemos que es viable. El Plan garantiza al gobierno la reducción significativa de la deuda para un pago anual máximo de $1,150 millones (lo que incluye los pagos de la deuda de COFINA) en lugar de hasta $3,900 millones en pagos contractuales sin la reestructuración de la deuda.

Creemos firmemente que, si se certifica este Plan, Puerto Rico tendrá un futuro muy prometedor en el que podrá alcanzar todo su potencial para beneficiar a todos los puertorriqueños y volver a ser la joya del Caribe.

Facebook
Twitter
LinkedIn
Compartir el blog:

Blogs relacionados