Las cooperativas de ahorro y crédito de Puerto Rico, al igual que las cooperativas financieras del continente estadounidense, brindan acceso a servicios bancarios y financieros a particulares y empresas. En todo Puerto Rico, el acceso a estos servicios financieros es esencial para el desarrollo económico, principalmente fuera de San Juan, donde la presencia de los bancos suele ser más limitada.
La Corporación Pública para la Supervisión y Seguro de Cooperativas en Puerto Rico (COSSEC) regula las cooperativas y asegura las acciones y depósitos hasta $250,000 por persona y por institución.
Queda mucho trabajo por hacer para que COSSEC construya un sistema cooperativo resistente que se ajuste a las mejores prácticas de los estados continentales. El Plan Fiscal de COSSEC, que los miembros de la Junta de Supervisión certificaron el 18 de mayo de 2023, traza la ruta para mejorar la supervisión reglamentaria y la estabilidad del sistema cooperativo en Puerto Rico.
COSSEC ha logrado cierto progreso, pero debe continuar supervisando los requisitos de capitalización de las cooperativas y debe continuar su trabajo en otras áreas que, de no evaluar con prontitud, podrían continuar siendo un obstáculo para que el sistema alcance su potencial.
- Las reformas a la gobernanza de COSSEC son clave para lograr avances y poder tomar decisiones de manera independiente.
- Las demoras en la resolución de las cooperativas no capitalizadas aumentan los costos a largo plazo para el Fondo de Seguros de COSSEC, lo que genera riesgos y primas de seguros más elevadas para las cooperativas solventes.
Hasta que se apruebe la legislación para reformar la gobernanza, el Gobierno y COSSEC deben implementar un protocolo de Pronta Acción Correctiva (PCA) como los que tienen en vigor la Administración Nacional de Cooperativas de Crédito (NCUA) y la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC). El protocolo de PCA exigiría a COSSEC tomar una decisión final sobre los planes de capitalización de las cooperativas con capitalización insuficiente.
COSSEC debe centrarse además en implementar políticas de contabilidad mejoradas y en convertir los libros contables de las cooperativas de “RAP” (Principios Contables Reglamentarios, por sus siglas en inglés) a “GAAP” (Principios Contables Generalmente Aceptados, por sus siglas en inglés).
Con la contabilidad RAP, las pérdidas potenciales quedan enmascaradas, pues los RAP no exigen que se revele el valor actual del mercado de los activos en peligro.
La transición también requiere legislación. Mientras se aprueba la legislación, el Gobierno y COSSEC deben implementar procesos internos como emitir cartas circulares y modificar los sistemas internos de bases de datos de COSSEC para que reflejen los cambios a la contabilidad GAAP.
Además, COSSEC necesita medir y controlar constantemente el impacto del riesgo de la tasa de interés en el valor de mercado del Fondo de Seguros de COSSEC y en los estados financieros de COSSEC.
Por último, teniendo presente que los ciberataques son cada vez más comunes y sofisticados, COSSEC debería aumentar el apoyo y la supervisión y asegurarse de que las cooperativas realicen rutinariamente las pruebas necesarias para mejorar su ciberresiliencia.
El Plan Fiscal de COSSEC establece una serie de reformas que le permitirán a COSSEC abordar las necesidades más apremiantes de las cooperativas, mientras prepara el camino del sistema en miras al futuro.